Tras la conclusión de las audiencias públicas convocadas por el gobierno nacional, algunas de las distribuidoras y transportistas más importantes del país están solicitando una serie de aumentos en las tarifas que promedian el 500%.
El gobierno nacional busca poner fin al esquema de segmentación tarifaria, reemplazándolo por una Canasta Básica Energética, que comenzaría a regir a partir de abril del 2024.
El objetivo de esta Canasta Básica Energética, que incluiría energía y gas, es implementar un sistema más justo para garantizar el consumo básico energético a los usuarios residenciales pertenecientes a los sectores más vulnerables.
La CBE estará regida por zona bioclimática: es decir que las tarifas tendrán un costo diferenciado según las distintas regiones y los tipos de consumos a lo largo del país.
Crisis en el sector energético: El sector se encuentra atravesando una profunda crisis marcada por la desinversión, el desfinanciamiento y el riesgo de desabastecimiento.
Con la Ley Ómnibus, se podrían eliminar los Fondos Fiduciarios y la consecuente eliminación de la “Ley de Zonas Frías”, una ley que establece la implementación de un subsidio que representa el 50% de las tarifas de los consumidores de las zonas más frías del país.