Ocurrió en el mediodía del lunes 10 de noviembre sobre calle Bahamonde. Integrantes de la Brigada de Investigaciones intentó detener a un prófugo de la justicia y todo terminó a los tiros.
Una persecución policial por parte de la Brigada de Investigaciones terminó a los tiros en el barrio San Cayetano. Los videos de las cámaras de seguridad de los vecinos trascendieron y se viralizaron en las redes sociales, generando asombro en la población debido a la violencia de los disparos.
El el segundo jefe del Área de Investigaciones de la Policía de Chubut, Pablo Lobos, expresó que los efectivos de la División de Investigaciones realizaron al menos doce disparos contra un vehículo en fuga para intentar detener a un conductor que tenía pedido de captura por robo agravado con uso de arma de fuego.
La persona, con amplios antecedentes penales, logró darse a la fuga y es intensamente buscada por las autoridades policiales al cierre de esta edición.
El tiroteo tuvo lugar entre las 12:30 y la 13 de este lunes, cuando se inició una persecución policial por parte de los efectivos de la Brigada al mando del comisario Javier Orellano.
Los policías de Investigaciones observaron circular por calle Bahamonde a un Chevrolet Agile color negro en el que los agentes reconocieron a su conductor, una persona sobre quien pesaba una orden de detención por el delito de robo agravado por uso de arma de fuego.
Según informó Lobos, el vehículo conducido por el prófugo detuvo su marcha.
Los efectivos policiales, que se movilizaban en un vehículo no identificable, descendieron y se identificaron como policías, dándole la voz de alto.
Sin embargo, el conductor no acató las órdenes y continuó su escape marcha atrás, chocando un Renault Clio que se encontraba estacionado en las inmediaciones.
Ante esta situación, y con el objetivo de detener la marcha del vehículo, el personal policial efectuó una serie de disparos.
Según las declaraciones de Lobos, los proyectiles fueron dirigidos específicamente a las cubiertas del Chevrolet Agile para frenarlo.
No obstante, el conductor logró evadir el cerco policial y se dio a la fuga. Ante la consulta, no se observó que el prófugo portara armas de fuego en ese momento de la persecución.
El procedimiento fue comunicado de inmediato al Ministerio Público Fiscal, que inició la correspondiente actuación judicial.
Lobos indicó que no se ocultó el hecho y que el armamento del personal policial está a disposición de la Justicia, aunque por el momento no se dispuso su secuestro.
La orden de captura contra el prófugo sigue vigente, y el personal de Investigaciones continúa trabajando para lograr su detención, manteniendo en reserva su identidad para no entorpecer la causa.
Con información de Crónica
