La Cámara hizo lugar a la presentación de una asociación civil vinculada con el macrismo que pidió ser querellante para volver a impulsar la causa.
La Cámara Federal porteña revisará el sobreseimiento de la vicepresidenta Cristina Kirchner en la causa por supuesto lavado de activos en la que se condenó al empresario Lázaro Báez, tras aceptar este jueves como querellante a una asociación civil.
La decisión se tomó por mayoría de los jueces del Tribunal de Apelaciones Mariano Llorens y Pabo Bertuzzi, con el desacuerdo del tercer integrante Eduardo Farah.
La Cámara aceptó como querellante a la Asociación Civil «Bases», que se presentó en la causa después que el juez federal porteño Sebastián Casanello sobreseyó a la expresidenta, a pedido del fiscal del caso Guillermo Marijuán, por entender que no existen pruebas en su contra.
Esta decisión se tomó el 5 de junio pasado luego de consultas del magistrado a las partes querellantes, AFIP y UIF, que también pidieron el sobreseimiento de la ex Presidenta.
La Vicepresidenta tenía dictada falta de mérito tras ser indagada en esa causa que investigó por multimillonarias maniobras de lavado de dinero y evasión fiscal a Báez, sus hijos y otros acusados, cometidas a través de la empresa «Austral Construcciones».
El empresario fue condenado a doce años de prisión en un veredicto tras un juicio oral y la Cámara Federal de Casación confirmó la condena pero redujo la pena a diez años.
Esa sentencia está ahora bajo revisión en la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
Casanello sobreseyó a la Vicepresidenta y rechazó tener como querellante a Bases, pero la Asociación apeló y ahora logró que se le adjudique ese rol de parte en la causa.
Lázaro Báez
Llamativamente, la organización llamada Bases Asociación Civil, que sería Bases Republicanas, integrada por distintas personas vinculadas al macrismo, algunos de los cuales han sido funcionarios de ese gobierno, se presentó en la causa para ser tenida como querellante. Esto es para poder impulsar el caso.
La Cámara Federal porteña aceptó además el recuso de queja de la Asociación, declaró «mal denegada» el rechazo de la apelación y la concedió.
La «labor aislada de la asociación» es la «última ocasión que tienen los habitantes de la República para verificar el alcance que tiene esta denuncia», consideró Llorens en su voto al recordar que las querellas ya existentes en la causa consintieron el sobreseimiento.
En disidencia, el camarista Farah advirtió que dicha Asociación se presentó en la causa «a más de diez años de iniciada» y «cuando los acusadores legitimados habían pedido la definición de la última situación pendiente, instando al sobreseimiento de Cristina Fernández de Kirchner, luego decretado por el magistrado».
«Lo central pasa porque no están dadas las condiciones que fija la ley para que la solicitante sea tenida por querellante», remarcó además en minoría.
El caso de lavado
Lázaro Báez, sus hijos, Leonardo Fariña y otra quincena de personas fueron condenados en febrero del 2021 por el Tribunal Oral Federal 4 por haber lavado 55 millones de dólares. En febrero pasado, Casación confirmó la condena pero redujo la pena para Baez y consideró que la obra pública no fue el origen de los fondos que fueron objeto del delito.
Todos los imputados fueron beneficiados con reducciones de sus condenas, entre ellos los dos hijos varones de Báez: Martín, que había sido condenado a nueve años, pasó a seis y medio; Leandro, de cinco a tres en suspenso.
La situación de Cristina estaba en stand by, pero sin acusadores en su contra, el juez Casanello dictó su sobreseimiento. La medida ahora será revisada.