San Lorenzo se quedó con el partido de ida ante San Pablo

Adam Bareiro marcó el gol que le dio la victoria al Ciclón. El próximo jueves, volverán a verse las caras en el Morumbí

La propuesta conservadora del Ciclón atentó contra el juego del conjunto brasileño, que a pesar de contar con figuras de la talla de Jonathan Calleri, Rafinha, Caio Paulista y Alisson no logró inquietar a Augusto Batalla.

Con más espacios en territorio brasileño, el Ciclón gestó la mejor acción de la noche a través de las intervenciones de Adam Bareiro, Nahuel Barrios, Agustín Giay y Gonzalo Maroni. Una jugada magnífica que representó el espíritu solidario del Cuervo que derivó con el grito del paraguayo, después de la notable asistencia de cabeza del ex Boca. Una gran obra colectiva que terminó con la valla invicta del conjunto paulista en el torneo continental y depositó al artillero guaraní como máximo goleador del certamen con 6 gritos.

Con el golpe recibido, la reacción del San Pablo llegó a través de la vía aérea. Fue mediante un gran cabezazo de Calleri que hizo lucir al arquero con pasado en River. La notable respuesta de Batalla evitó la igualdad para que la fiesta que se vivía en las tribunas continuara sin inconvenientes.

A pesar de los punzantes envíos de Caio Paulista, el ingreso de Alexandre Pato y la voracidad del uruguayo Michel Araújo, San Lorenzo logró un triunfo notable a base del sacrificio, la garra y el corazón. Con el Perrito Barrios como bandera, los del Gallego se quedaron con el primer duelo y buscarán la clasificación en Brasil. En Boedo sueñan con una nueva hazaña, como la del 2002, cuando con el mismo estratega lograron quedarse con el título. Para ello todavía falta un extenso camino, pero el Ciclón dio otro paso hacia la gloria. El Morumbí será la próxima escala