River goleó a Barracas y avanza en la Copa Argentina

El Millonario recuperó la memoria y se impuso por 3-0 en San Luis. Palavecino (dos) y Casco convirtieron para los dirigidos por Marcelo Gallardo, que no aflojaron ni ante la expulsión de David Martínez.

Y una noche, en San Luis, River Plate volvió a ser River Plate. Con algunos flashes de su mejor versión, el Millonario goleó 3-0 a Barracas Central y accedió a los octavos de final de la Copa ArgentinaAgustín Palavecino (dos) y Milton Casco anotaron para el elenco de Núñez, que fue superior a su rival de punta a punta. Así, se repuso de la eliminación en la Copa Libertadores a manos de Vélez y de las dos derrotas consecutivas en la Liga Profesional.

La Banda saltó al campo con el espíritu de sus mejores versiones, al menos desde la energía y la intensidad. Con una presión pareja y extendida, acorraló a su rival en 40 metros durante los primeros 10 minutos. Recuperó alto y llegó bien hasta el área, pero le faltó la puntada final. Lo mejor en ese lapso, un remate de Palavecino que quedó en manos del arquero.

El que tradujo la superioridad en diferencia en el marcador fue Milton Casco. A los 20 minutos, tras un pase filtrado de Barco y un centro de Elías López, la defensa de Barracas rechazó y el balón le quedó al lateral, hoy por la derecha. Y sacó un remate perfecto, con el revés del pie, que se clavó en el ángulo superior derecho del arco de Gagliardo.

Con el duelo más abierto, el Millonario pudo ampliar el score, por ejemplo, con el tiro cruzado de Simón que tapó Gagliardo. Pero Barracas tuvo dos clarísimas para igualar. Primero, a los 23, Sepúlveda enganchó dos veces ante Maidana y remató, pero no logró incomodar a Armani. Y a los 28 un cabezazo de Bandiera pasó muy cerca del palo derecha del elenco de Núñez.

En ese contexto más cambiante, de todos modos River continuó siendo el más profundo cuando se lo propuso. Y un centro que se desvió de Simón estuvo a punto de vulnerar al portero, que salvó con un manotazo providencial.

La primera mitad del complemento fue un concierto de River. Con dominio total, paciencia y buenos movimientos. Lo tuvo Simón con un remate alto y la Banda merodeó el grito en más de una oportunidad. Lo consiguió a los 20, con una gran jugada colectiva. En su epílogo, López se cerró y tocó en cortada para Aliendro, quien aguantó de espaldas a su marcador, ojeó lo que pasaba a su alrededor y habilitó de taco a Palavecino, quien definió con un puntazo: 2-0.

Pero una situación puso otra vez en partido a Barracas: Merlos le sacó correctamente la segunda amarilla a Martínez por una falta en la que salió a cortar desarmado, pero instantes antes omitió una para un defensor de Barracas por una falta en una acción prometedora de Beltrán. De ahí la protesta del Millonario.

Pero se olvidó rápidamente: a los 28′, Palavecino recibió apenas afuera del área y sacó un derechazo impactante para firmar el 3-0.

Y el camino del cronómetro hasta el final fue cómodo para el vencedor. Que tras las salidas de Julián Álvarez y Enzo Fernández y las caras nuevas (bien Aliendro, con adaptación acelerada) debe reinventarse como tantas veces en la era Gallardo. Con el retorno de algunas de las figuras del equipo que ganó la Liga Profesional 2021 (Palavecino-Simón), encontró fútbol y apuesta a que el triunfo ante el Guapo oficie de punto de partida. El Millonario se medirá en los octavos de final ante Defensa y Justicia, institución que en la fase anterior dejó en el camino a Argentinos Juniors. Pero antes, el domingo, contra Vélez en Liniers, debe probar que ante Barracas halló la fisonomía que lo lleve a pelear la Liga, la Copa Argentina y la clasificación a la Libertadores 2023.