Sucedió pasadas las 6 de la mañana del domingo en Ibiza Disco. El sujeto estaba bajo los efectos del alcohol y alguna otra sustancia, superaba en altura y fuerza a dos uniformados que tuvieron que pedir refuerzos para detenerlo.
En la madrugada de este domingo, el personal policial se encontraba controlando el cierre de los locales nocturnos cuando la cabo Milagros Argañaraz solicitó urgentemente la presencia de un móvil en el local nocturno Ibiza. Al llegar al lugar, el personal de turno saliente, compuesto por el cabo Quilapan y la sargento Muñoz, se encontraba forcejeando con un joven, sin poder reducirlo.
El individuo superaba en altura y fuerza a los efectivos, por lo que fue necesario un esfuerzo conjunto para lograr esposarlo. La tarea se dificultó debido a que el sujeto –según consta en el parte policial- “parecía haber consumido alcohol y alguna sustancia tóxica”. Una vez reducido, fue rápidamente conducido a la comisaría.
La sargento Muñoz informó que F N A había sido retirado del local por causar disturbios e intentar golpear a los empleados. Al volverse muy agresivo y comenzar a golpear las puertas con puntapiés, el personal policial intentó calmarlo y pedirle que se retirara del lugar.
Sin embargo, el individuo intentó golpear al efectivo Quilapan, por lo que se intentó reducirlo nuevamente. Durante el forcejeo, le provocó una lesión en la pierna izquierda de la sargento Muñoz.
La oficial inspectora Marlene Ibañez intervino en el caso. Cabe mencionar que F N A continuó mostrándose muy agresivo incluso después de ser detenido. Por seguridad de los efectivos y del propio detenido, este fue alojado en el calabozo con las esposas puestas. Así y todo, “comenzó a golpearse e incitar a pelear a los uniformados”.
Según la Policía de la Seccional Primera, el padre del joven se acercó a la sede policial y estuvo en todo momento en comunicación directa con su hijo. Al informarle sobre la situación procesal de su hijo, este proporcionó todos los datos necesarios e intentó colaborar en todo lo posible. Mencionó que su hijo está entrenando para una pelea profesional.
Se avisó a la fiscalía, a cargo de Natalia Gómez; a la Oficina Judicial, en la persona de Antonella Szymankiewicz, y a la jueza penal Raquel Tassello