Preocupación por el posible cierre del SER para personas con discapacidad en Comodoro

Comodoro Rivadavia enfrenta una gran incertidumbre debido a la posible desaparición del Servicio Educativo y Recreativo (SER), una institución que durante 17 años ha sido esencial para jóvenes y adultos con discapacidades severas.

Este espacio surgió como respuesta a un reclamo de padres autoconvocados, quienes presentaron un amparo ante la justicia para garantizar oportunidades educativas y recreativas para sus hijos, luego de que egresaran de la escuela especial 514.
Actualmente, el SER funciona en las instalaciones de la escuela 517, ubicada en Juana Azurduy y Lisandro de la Torre.

Araceli Urbina, profesional vinculada al SER, explicó que el principal problema radica en que este servicio no es considerado un nivel educativo obligatorio. “Nuestros estudiantes son jóvenes y adultos mayores de 18 años, y hoy en día las leyes han cambiado. La normativa actual nos indica que el SER debería dejar de existir, pero esto es un problema porque no hay otro lugar donde estos jóvenes puedan acudir», señaló Urbina.

El perfil de los alumnos del SER incluye personas con discapacidad múltiple, muchos de ellos en sillas de ruedas, con compromisos cognitivos, de lenguaje, e incluso algunos con ceguera. «Es necesario trabajar con ellos desde la Educación Especial, en un entorno adecuado y con profesionales capacitados», agregó.

A lo largo del año, la comunidad educativa del SER ha estado en constante diálogo con diversas instituciones, como el Ministerio de Educación y la Dirección Inclusiva, así como la Municipalidad de Comodoro Rivadavia. Sin embargo, aún no se ha llegado a una solución definitiva. Urbina expresó su preocupación sobre la falta de continuidad: “Cada año es una incógnita. Este año, aunque estuvimos en tratativas, todavía no hay una resolución oficial sobre qué sucederá”.

Actualmente, el SER cuenta con 14 estudiantes y una lista de espera, pero debido a la falta de profesionales, no pueden incorporar a más personas. “Solo contamos con 11 profesionales, todos dependen de la planta funcional de otras instituciones de educación especial, y ninguno pertenece directamente al SER. Si las escuelas los disponen, ellos deben retirarse, lo que interrumpe el servicio”, advirtió Urbina.

La comunidad teme que el cierre del SER deje a muchas personas sin un espacio donde recibir atención adecuada y piden que el Ministerio de Educación o alguna otra entidad se haga responsable de garantizar la continuidad de este servicio esencial para Comodoro.