Padres y abuelos siguen reclamando por las infancias compartidas

Se movilizaron hacía el Juzgado de Familia en busca de una respuesta justa.

Cristina Eguilior es una abuela que reclama porque no puede ver a su nieto: «Vengo de Neuquén y mi nieto vive en esta región. Es innumerable la cantidad de viajes que he hecho infructuosos. Yo me tengo que reunir con la mamá de mi nieto para arreglar vacaciones, horarios de visitas y realmente esta es la cuarta vez que vengo y me voy con las manos vacías porque en alguna ocasión 10 minutos antes de la conciliación la cancela, en otras oportunidades le atribuye cualquier mentira para también suspender».

«Para nosotros es muy valioso estar en este lugar porque es el único lugar que nos puede resolver que por nuestros propios medios no pudimos. Cuando uno recurre a este sitio es que ya pasaron meses o años, venimos a este lugar que es el único que nos puede dar certezas, horarios y días de vacaciones, eso casi siempre se cumple. Pero si no está escrito, no está y si no está escrito no lo vemos. Entonces nos encontramos por un lado con la cantidad de chicanas, engaños, falsas enuncias, hostigamientos por parte de la mamá de mi nieto. Y nos encontramos con que este lugar que podría achicar el tiempo de espera, lo suma porque es muy lento».

Continuó: «Ante una situación de chicana nos encontramos con una situación de una cita que será dentro de unos meses, con la posibilidad de que cuando llegue ese día tampoco concurra. Así fue fallido en noviembre de 2022, en junio de 2023, fallida una audiencia en el mes de agosto y fallido en el mes de octubre que vine innecesariamente porque la cita no se produjo. Juega en contra de nuestro estado anímico porque uno se va cansando, la vida va pasando y yo ya no soy joven. A esta altura de mi vida quisiera saber que en vacaciones de invierno, de verano, semana santa o cuando se decida yo voy a estar con mi nieto en Neuquén o Lago Puelo que es un lugar intermedio. Me siento desilusionada porque no pasa nada».

El nieto de Cristina tiene 6 años: «Lo que tenemos a favor es que él nos quiere mucho, siempre quiere estar un día más con nosotros y le tenemos que explicar que tenemos horarios. Lo veo los días que le corresponde a mi hijo», indicó la abuela.