Padres de la Escuela 711 exigen corredores seguros tras robos de alumnos en los últimos días

Jessica Mansilla, madre de un alumno de la Escuela 711 de Comodoro Rivadavia, expresó su preocupación por la falta de seguridad en las inmediaciones del establecimiento y la necesidad de implementar corredores seguros de manera urgente.

Jessica Mansilla, madre de un estudiante de la Escuela 711 en Comodoro Rivadavia, se reunió con el comisario local para discutir la implementación de un corredor seguro en las cercanías del establecimiento educativo. Según Mansilla, el comisario informó que ya se había abordado el tema con la directora de la escuela y que se comprometió a trabajar con las autoridades de tránsito para mejorar la circulación vehicular en la zona, caracterizada por ser angosta y congestionada.

Mansilla destacó la preocupación de muchos padres que deben dejar a sus hijos en esquinas alejadas de la escuela, lo que genera inseguridad, especialmente para aquellos que deben caminar o tomar el transporte público para llegar a sus hogares. «Van a tratar de armar el corredor seguro en las zonas claves donde se baja la mayoría del colectivo,» comentó Mansilla, subrayando la importancia de contar con una mayor presencia policial.

La madre también mencionó que la escasez de personal policial es un desafío que complica la implementación efectiva de estos corredores. A pesar de las limitaciones, las autoridades han realizado algunas mejoras en la infraestructura, como la reparación de las luces en el hall de entrada de la escuela y en áreas cercanas, aunque la iluminación en la vía pública sigue siendo insuficiente.

El tema de la inseguridad no es nuevo, y Mansilla enfatizó que aunque el reciente incidente con Gonzalo, un estudiante que sufrió un desenlace fatal, fue aislado, los robos a estudiantes no lo son. «No queremos volver a pedir justicia,» declaró Mansilla, exigiendo que los corredores seguros se mantengan a largo plazo para proteger a todos los estudiantes de la ciudad.

Finalmente, Mansilla hizo un llamado a las familias de los alumnos a participar activamente en la búsqueda de soluciones, incluso cuando sus obligaciones laborales les impidan asistir a las reuniones. «Lo que queremos pedir es que los corredores seguros no dejen de estar,» concluyó, enfatizando la urgencia de la situación y la necesidad de una respuesta inmediata.