Así lo aseguró María Teresa Traba por la falta de respuestas para la confirmación de la sede para la Asociación Una Sonrisa en tu Cabeza ya que no pueden reunirse para realizar pelucas oncológicas.
La Asociación «Una Sonrisa en tu Cabeza», que desde 2018 confecciona pelucas para pacientes oncológicos, enfrenta serias dificultades debido a la falta de una sede fija donde realizar su labor. Según María Teresa Traba, presidenta de la asociación, esta situación ha detenido todas las actividades y ha agravado el retraso en la entrega de pelucas.
“Desde 2018 estamos en busca de un lugar fijo. Como no lo logramos, vamos alquilando o nos prestan distintos lugares y cada año tenemos que andar mudándonos. Ahora estábamos alquilando en una sede que no tiene baños ni agua, entonces no está en condiciones para recibir pacientes”, explicó Traba.
A pesar de haberse reunido con el intendente y el concejal Montenegro a finales del año pasado, aún no hay una solución concreta. “Ellos nos dijeron que iban a resolverlo, ya sea arreglando el lugar actual o dándonos otro. Esta semana el concejal Montenegro se comprometió a confirmarnos un espacio, pero seguimos esperando”, detalló.
El retraso afecta directamente a los pacientes que necesitan las pelucas con urgencia. “Ya teníamos una lista de espera desde el año pasado. Hoy tenemos unas diez pelucas pendientes de realizar y los pedidos no paran de llegar. Sin una sede, no podemos avanzar y esto nos atrasa aún más”, comentó Traba con preocupación.
El equipo de la asociación está conformado por 12 personas que trabajan en la confección de las pelucas, cada una con un rol asignado. Sin embargo, Traba enfatizó la necesidad de más voluntarios: “Mucha gente colabora desde su casa enviándonos cosas, pero lo que realmente necesitamos es su tiempo. Tener más manos solidarias sería fundamental”.
Para la presidenta, la demora en la respuesta política es inaceptable frente a la urgencia de los pacientes. “Los tiempos de los pacientes no son los de los políticos ni los nuestros. Una paciente empieza quimio, a los 20 días se le cae el cabello, y necesita su peluca. Nosotros necesitamos tener un espacio cuanto antes para poder trabajar”, subrayó.
La asociación espera que esta semana se confirme la sede prometida para poder reanudar su importante labor y continuar brindando apoyo a quienes enfrentan el desafío del cáncer.
