Jaqueline Mariana Rivera Graneros fue imputada como presunta autora del homicidio de Pablo «Chipi» Rodríguez, ocurrido el domingo, y quedó en libertad. Este martes un tribunal de revisión revocó el fallo y ordenó la prisión preventiva de la acusada por tres meses. Habría lugar para ella en Rada Tilly.
En la audiencia del lunes presidida por la jueza Daniela Arcuri se formalizó la investigación por el crimen de Pablo “Chipi” Rodríguez, ocurrido durante la mañana del domingo en inmediaciones de la avenida 10 de Noviembre y calle Francisco Behr, en el barrio San Cayetano.
La principal detenida, Jaqueline Mariana Rivera Graneros (27), fue imputada por los fiscales Cristian Olazábal y Florencia Do Carmo, por el delito de homicidio simple. Según la investigación, la mujer le propinó cuatro puñaladas a “Chipi” Rodríguez, una en la zona del abdomen, otras dos en el intercostal derecho y la restante en la muñeca derecha.
En esas circunstancias, la jueza natural de la causa le dictó a Rivera Graneros la libertad con presentaciones semanales ante la agencia de supervisión y la prohibición de contacto con testigos. Argumentó su decisión por la emergencia carcelaria de Comodoro y porque la mujer es madre de una menor de 10 años.
UNA EXTENSA REVISION
Los fiscales Cristian Olazábal y Florencia Do Carmo pidieron de inmediato la revisión que se celebró este martes en la Oficina Judicial. Allí, los representantes de la sociedad pidieron que se revoque la resolución de Arcuri por considerar que el caso, si bien debía ser abordado con perspectiva de género, carecía de relación desigual entre la mujer y un varón. Agregaron que las condiciones de una medida de coerción eran idénticas para ambos y no tenía que haber un trato diferencial por ser una mujer.
Respecto del contexto de encierro y de que no había plazas disponibles en la ciudad, los representantes fiscales expusieron que esa situación no había sido acreditada y que tampoco se había consultado a las autoridades correspondientes. En esa línea la jueza hizo lugar al pedido defensivo de la abogada oficial María de los Ángeles Garro.
Sin embargo, los fiscales consideraron que no se había valorado correctamente el peligro de fuga y además que no se había acreditado si la imputada era madre de un menor de 10 años y si el hijo convivía con ella.
Los jueces Jorge Odorisio y Carlos Ariel Tedesco compartieron los argumentos en forma parcial. El primero revocó la decisión de la jueza Arcuri y el segundo la respaldó.
Al no haber acuerdo, la Oficina Judicial convocó a un tercer juez: Mariano Nicosia. Este compartió los argumentos fiscales y entonces por mayoría decidieron declarar parcialmente la nulidad de la decisión de Arcuri y revocar la libertad de Mariana Rivera Graneros. Por lo tanto, dispusieron la prisión preventiva por el término de tres meses de la presunta asesina de “Chipi” Rodríguez. Habría lugar en una celda de la comisaría de Rada Tilly. Tampoco se descartaba que fuera a un lugar especial de la alcaidía.