Pocos minutos después de las 13 horas, la funcionaria judicial llegó al establecimiento del barrio 9 de julio. Intentó llevar tranquilidad y pidió las denuncias formales para brindar asistencia a los niños y avanzar con la investigación.
Luego de una ajetreada mañana de conflicto en la puerta en la Escuela de Nivel Inicial 406 de Comodoro Rivadavia, la fiscal Andrea Rubio llegó al lugar pocos minutos después de las 13 horas mientras los padres de las víctimas de abuso y otras familias de la comunidad educativa esperaban respuestas de las autoridades.
Rubio llegó y fue escoltada por agentes de la policía, y antes de ingresar al establecimiento se detuvo a conversar con los padres.
En este marco pidió a todos los padres de las víctimas el realizar denuncias formales, en la que se identifiquen tanto ellos como a los menores de edad, y quienes tengan otras pruebas las adjunten a la misma. “Si no hacen la denuncia formal esto queda en quejas, y no ayudan a realizar la investigación”, destacó a los padres.
Por otro lado, remarcó que, tras la realización de las denuncias correspondientes, desde el Ministerio Público Fiscal pondrán a disposición el Servicio de Asistencia a la Víctima, que se contactará con cada una de las familias para brindar asistencia psicológica.