El padre murió sin reconocerlo como hijo, pero el abuelo fue a la Justicia y logró darle su apellido

El fallo fue firmado por una jueza de Tucumán, quien inclusive grabó un video para que el chico pueda entender el por qué de su decisión.

Con un emotivo fallo, una jueza de familia resolvió la situación de un nene que no fue reconocido por su padre, pero cuyo abuelo paterno sí lo reconoció como nieto y logró darle el apellido.

Se trata de una historia que reúne el amor y el dolor, factores que incidieron en la sentencia de Mariana Josefina Rey Galindo, del juzgado de Familia y Sucesiones del Centro Judicial Monteros, Tucumán. La jueza, después de entrevistarse con el grupo familiar, decidió que Tomy (el seudónimo del niño) lleve el apellido de su abuelo, con el que el nene pudo construir un lazo afectivo pese a que el padre del chico nunca reconoció su paternidad.

La presentación se realizó tras la muerte del J.R. Ge, papá del nene, y la magistrada entendió que “no se trataba de una filiación póstuma, sino de un proceso voluntario y no contencioso, en el que se conjugan como elementos constitutivos de la identidad la inscripción genealógica y el amor, unidos al derecho primordial a la ancestralidad”, publica TN.

Trazando un paralelismo con “Coco”, la película animada que narra la historia de un niño que busca en su pasión por la música desentrañar sus orígenes y reencontrarse con sus ancestros, la jueza vio en este abuelo y su nieto a dos personas que -unidas por el amor- buscaban en los tribunales el reconocimiento legal de este vínculo.

Además, la mamá del nene y Kike Ge, el abuelo, presentaron muestras de ADN, que establecieron el nexo biológico entre Kike y Tomy. En ese sentido, Rey Galindo explicó que “el principal objetivo era que Tomy se sintiera 100% Ge”, esto es, reconocido jurídicamente como parte de su familia paterna.

La sentencia fue acompañada por un breve video en el que la jueza le explica a Tomy el por qué de su decisión. “¡Hola, Tomy! Soy Mariana, la jueza, y te voy a acompañar en este viajecito al pasado tuyo y de tu abuelito”, fue el mensaje de la magistrada, quien de ese modo logró reconstruir toda la historia.