Este sábado se llevará adelante una sesión extraordinaria en el Concejo Deliberante de Comodoro Rivadavia con un único y urgente objetivo: definir la prórroga del contrato del transporte público por 90 días. Si no se aprueba, el domingo 1° de junio la ciudad amanecerá sin colectivos en funcionamiento y nuevamente los comodorenses son rehenes de decisiones políticas.
Tras el ingreso desde el Ejecutivo en la tarde del jueves parecía que todo sería en paz y en un ambiente de tranquilidad ya que el tiempo avanzaba y no había novedades.
Pero con el correr de los minutos y ysña sobre la tarde un dato político alteró el clima en el recinto Pellegrini y Rivadavia.
Es que el exintendente Juan Pablo Luque se hizo presente en la «Casa del Pueblo» para mantener un encuentro reservado con su bloque de concejales (Panquilto,Luque, Aguilar, Simunovic, Cufré y Montenegro) y según pudo confirmar este medio, Luque les habría pedido expresamente no votar a favor de la prórroga.
La consecuencia directa de esa maniobra sería el corte total del servicio a partir del domingo, afectando a miles de vecinos que dependen del transporte público para estudiar, trabajar o asistir a turnos médicos.
Aún no trascendió oficialmente qué pretende ex candidato a la gobernación a cambio de revertir la postura de su bancada, pero fuentes cercanas señalaron que estaría condicionando el voto a un pedido puntual de estructura para una eventual campaña política.
En otras palabras, el transporte de los comodorenses estaría siendo usado como ficha de negociación partidaria.
Veremos en las próximas horas cómo se desarrolla esto. Mientras tanto, la comunidad queda en medio de un juego de presiones e intereses políticos alejados de la realidad.
