Pasaron 18 días de la caída del techo y de conocerse el peligro de derrumbe en uno de los edificios del complejo habitacional de la zona sur de Comodoro. Las familias damnificadas siguen esperando un lugar donde vivir.
Liliana Orozco, vecina damnificada, durante el cacerolazo que llevaron adelante en esta mañana en las inmediaciones de las viviendas afectadas manifestó: «No tenemos respuesta fehaciente de posibilidad de solución, algo que no nos pudo faltar fue un marcador y una pared en donde nosotros les estamos diciendo a nuestros funcionarios y representantes que significa este espacio para nosotros y es nuestro hogar. Nuestro hogar que está a punto de derribar ese tramo con él».
«La escalera está en un estado deplorable, no podemos subir. La respuesta de los funcionarios fue la asistencia de los días viernes y sábado que acercaron una caja de alimentos secos, colchones y una frazada a las familias que lo pidieron. Esa es la medida que tomaron, 18 días llevamos hoy y desde el Concejo Deliberante nos dieron las medicaciones que necesitan los vecinos».
La vecina expresó: «Seguimos todas las líneas que la burocracia mantiene, notas, pedidos, notas, pedidos. Lo hicimos el día 27 de febrero, lo que estamos pidiendo es el acta-informe que declare que está en peligro de derrumbe y por eso fuimos evacuados el día 23 de febrero. El segundo informe es el técnico interdisciplinario que tiene que decir en qué situación se encuentra todo el complejo porque nuestro edificio es el que ha manifestado un peligro de derrumbe inmediato pero todo el complejo tiene lo mismo».
Además de esperar una respuesta, los vecinos se encuentran midiendo las grietas que se han formado: «Esto lo hacemos por sugerencia del señor que trabaja en las minas, nos dijo que hagamos el relevamiento y que midamos en distintos puntos cómo ha ido creciendo la grieta. Del día 8, que fue la última medición que hice, a hoy lunes hay 5 milímetros más».
«En el día de hoy vinieron 4 funcionarios que se identificaron cómo que eran del IPV, los atendió el comisario Espósito y el oficial Trípoli y no duraron más de 5 minutos. Les pedí que se tomaran cinco minutos más para que ya que habían visto la realidad de nuestro edificio, que fueran y vean la realidad de otro edificio que todavía no está en peligro de derrumbe pero tiene el mismo daño al día anterior al nuestro».
Cómo continuarán, Liliana indicó: «Vamos a seguir expresándonos, vamos a seguir mostrando del lugar del siniestro cómo hemos caído en esta desidia».