El conflicto, iniciado el día jueves por una medida de fuerza sostenida por el Sindicato de Empleados Portuarios Argentinos, pudo ser destrabado por el Gobierno provincial, poniendo fin a una posible catástrofe ambiental en la región.
En virtud de la gravedad de la situación provocada por la reciente medida de fuerza del Sindicato de Empleados Portuarios Argentinos (SUPA), por la cual se impidió la habitual descarga de langostinos en los puertos de la provincia, el Gobernador del Chubut, Ignacio “Nacho” Torres, dio instrucciones expresas a su gabinete de solucionar la disputa en la mayor brevedad posible, evitando así una posible catástrofe ambiental que hubiera tenido un profundo impacto en la salud de todos los vecinos de la ciudad de Rawson.
De este modo, el secretario provincial de Pesca, Andrés Arbeletche, y su par de la secretaría de Ambiente, Juan José Rivera, lograron destrabar un conflicto que se había iniciado de manera sorpresiva en la tarde del jueves, y que trajo aparejado un alto impacto ambiental y pérdidas millonarias para todo el sector.
Durante la intervención, llevada adelante por los funcionarios provinciales frente al Sindicato de Empleados Portuarios Argentinos, estuvo presente también el intendente local, Damián Biss, quien acompañó de manera presencial las gestiones sostenidas por los secretarios provinciales de Pesca y Ambiente con el propósito de desarticular la bomba ambiental provocada por la existencia de capturas perecederas que se estaban descomponiendo en las bodegas de la flota de barcos anclados en el Puerto de Rawson.
En virtud de semejante situación, por parte del Gobierno provincial se le hizo saber a la entidad gremial la gravedad de las consecuencias legales y ambientales que implicaba la decisión adoptada, logrando finalmente que SUPA revea su decisión y proceda a efectuar la descarga de los buques en cuestión. «Vamos a ordenar la pesca en Chubut, aunque a algunos les moleste», sentenció Arbeletche, a modo de cierre.
