Mónica Martí, directora de la Escuela Nº 218, habló sobre la situación edilicia de la institución: «Hemos estado muy preocupados todo este tiempo, a partir del 14 de febrero cuando yo me presenté comencé a transmitirle la preocupación a los padres acerca del funcionamiento ya que el año pasado tuvimos 45 días sin presencialidad debido a que se incendió el tablero de electricidad y mi preocupación era estar este año de la misma manera. Perdimos una gran cantidad de matricula importante. Los padres al ver que no hay respuesta, comienzan a retirar a los chicos a llevarlos a otras instituciones».
«Este año los padres entendieron la problemática. En el SUM estábamos sin luz prácticamente, un solo foco funcionaba, estábamos con la calefacción apagada. Entonces me preocupaba esto de volver a tener que decirle a las familias que no podemos tener a los chicos en la escuela porque hace mucho frío, porque no tenemos las necesidades que corresponden».
La directora continuó: «Entre los padres se pusieron de acuerdo para ayudar a la escuela de sus hijos. Tal es así que una familia donó la luminaria que no teníamos. Tenemos también un reclamo de cloacas, que es un reclamo infinito que tengo, porque cada 20 días se obstruyen los sanitarios, y la SCPL como favor viene y nos ayuda, porque en realidad el problema lo tenemos en los desagües internos, soy consciente que no les corresponde hacer ese trabajo».
«La problemática del gas, por ejemplo, acabamos de lograr encender la caldera, vamos a ver si era la correa, que en realidad estaba cortada, pero tenemos problemas afuera, porque los reguladores que tiene son reguladores de vivienda común, entonces la presión del gas no es la que corresponde para un edificio como este, pero ahí yo ya no puedo intervenir. Esto tiene que intervenir Obras Públicas o a quien le corresponde. Todos los reclamos se han hecho, se han hecho en formato de nota, en formato papel, ahora tenemos un sistema de incidencias en el que también se han cargado los reclamos, así que estamos a la espera de todo esto».
El cambio de correa lo hizo una empresa privada. Lo hicimos Ad Honorem, se enteraron del problema que teníamos, lo hicieron para que los chicos no pierdan días de clase», informó Martí.
Se le consultó si durante el verano hubo refacciones: «Durante el verano no se hizo absolutamente nada, tuvimos acá una guardia por cualquiera de estas cosas que vinieran a trabajar».
