Durante la noche del domingo reconoció la derrota pasadas las 23 y aseguró que seguirá trabajando por todos los chubutenses desde el Congreso Nacional. Declaró estar conforme con el trabajo realizado a pesar de no haber alcanzado los votos necesarios para llegar a la intendencia.
Minutos después de las 23, la candidata a intendente Ana Clara Romero, brindó sus declaraciones desde el local de Alem 93, tras felicitar el triunfo de Othar Macharashvili. Agradeció a todos los presentes, «Guille Almiron, Jorge Ávila, Tomás Buffa y todo el equipo que hicieron posible este resultado, la verdad que se pasaron, confiaron, trabajaron, apostaron y para mí eso no tiene precio y se los agradezco de todo corazón».
En tanto, expresó «no me quiero olvidar de Nacho Torres y Gustavo Menna que van a cambiar Chubut a partir del 10 de diciembre. Ellos hicieron una gran elección y van a defender los recursos de nuestra provincia».
Ana Clara se consolidó nuevamente como la fuerza más votada, lo que permitió que crezca el espacio de Juntos por el Cambio en el Concejo Deliberante.
La candidata, acompañada por familiares, amigos, dirigentes, vecinos e integrantes del equipo agradeció el apoyo y expresó que si bien los votos obtenidos no fueron suficientes para llegar a la intendencia representaron un fuerte respaldo y «hay muchos que dijeron que sí».
Realizó un balance positivo de todo lo actuado no sólo a lo largo de la campaña, sino en todos los años anteriores en lo que estuvo recorriendo los barrios y reuniendose con vecinos e instituciones para conocer de primera mano sus inquietudes y necesidades, lo que contribuyó a generar la propuesta que ofrecieron al electorado.
Ana Clara saludo al intendente electo, al tiempo que seguirá trabajando para los vecinos de Comodoro. Dijo estar muy conforme y contenta, mientras continúa consolidándose el espacio, reconociendo que no es fácil enfrentar a una estructura como el oficialismo, tras 20 años en el poder.
Resaltó el trabajo llevado a cabo y el enorme esfuerzo que la consolidaron como la segunda fuerza indiscutida de la ciudad, «sin aparato y desde el llano», conversando cara a cara con la gente y referentes de numerosas espacios. Ahora resta seguir caminando con la convicción inalterable de que hay otra manera de hacer las cosas.