Todo sucedió el pasado 1° de agosto en medio del temporal de viento que sacudió a la ciudad. Desde la institución indicaron que nadie se ha hecho cargo de la reparación y los cerca de 100 estudiantes afectados no pudieron retomar las clases.
El hecho ocurrió durante el segundo temporal de fuerte viento, ocurrido el martes 1 de este mes de agosto y que registró ráfagas de más de 130 kilómetros por hora, provocando –entre otras consecuencias- que el techo de la escuela ubicada en Lisandro de la Torre y Congreso se desprendiera y cayera sobre el mobiliario y los materiales didácticos de las aulas. Afortunadamente, no hubo heridos ya que los alumnos y docentes se encontraban ausentes por el alerta meteorológico.
Sin embargo, el incidente dejó sin espacio físico a unos 100 alumnos que desde entonces no han podido volver a tener clases.
Según denunciaron los padres y madres de los estudiantes, nadie se ha acercado a solucionar el problema ni a ofrecer una alternativa para que los niños y niñas puedan continuar con su educación, indicó El Patagónico.
Los padres y madres de los alumnos afectados exigieron a las autoridades educativas que se hagan cargo de la reparación del techo y que se les brinde una solución urgente para que sus hijos e hijas puedan retomar las clases lo antes posible.
