La Albiceleste sueña con una histórica victoria en el máximo certamen: enfrente tendrá a Italia, Sudáfrica y Suecia.
Cada vez falta menos para que Argentina arranque su camino en la Copa del Mundo femenina Australia-Nueva Zelanda 2023. El Grupo G será todo un desafío para las dirigidas por Germán Portanova, pero las jugadoras llegan convencidas de lograr el objetivo: ganar el primer partido en la historia del seleccionado en el máximo certamen internacional y soñar con un pase a octavos de final.
Del otro lado aparecen tres fuertes naciones con el mismo hambre de gloria y, a pocos días de la patada inicial, sólo resta hablar dentro del campo de juego.
FECHA 1: ITALIA
Italia arriba a la Copa del Mundo como número 16 del ranking FIFA y con un andar irregular en sus últimos amistosos. Se trata de la quinta participación del combinado europeo (1991, 1999, 2011 y 2019) en la que intentará superar su marca de cuartos de final, que logró en dos ocasiones.
La preparación en este año arrancó con dos duras derrotas en febrero, ante Bélgica e Inglaterra. Sin embargo, la Azzurri no perdió en sus últimos cuatro compromisos internacionales con victorias ante Corea del Sur, Colombia y Nueva Zelanda además de un empate sin goles con Marruecos. En esta línea, tratará de prolongar su racha de victorias en la fase de grupos. Las representantes de UEFA se caracterizan por tener una fraternidad producto de numerosos años de experiencia que será la envidia de muchos equipos de la competición.
Tres compañeras de la Juventus y otras tres del AS Roma suelen conformar la columna vertebral de su país, ya que no sólo se conocen entre sí en el campeonato doméstico como rivales, sino también como colegas en la selección. Dentro de las personalidades a destacar es imposible saltear a Cristiana Girelli, quien se posiciona para ser la abanderada del equipo en el Mundial. Además, la entrenadora Milena Bertolini lleva cerca de seis años en el cargo, lidera el proyecto a largo plazo y el resultado que arrojó tanto trabajo es un plantel con mucha química y conocimiento.
El gran problema que mostró Italia en los últimos años fue su desempeño contra otras naciones europeas. La Azzurri quedó eliminada de la Eurocopa 2022 sin conocer la victoria y tiende a tener dificultades en las demás competiciones continentales. Con Suecia en su zona y probablemente muchos otros equipos europeos avanzando a las fases eliminatorias, dicho obstáculo mental podría acabar siendo la puerta de salida durante la Copa del Mundo.
Con Argentina y Sudáfrica en el Grupo G, es la favorita para quedarse con el segundo puesto y aspira a conseguir el pase a los octavos de final.
FECHA 2: SUDÁFRICA
Tener a la nación campeona de África no es una buena noticia para el resto de la zona. Sudáfrica asumirá su segunda participación consecutiva (estuvo en Francia 2019) y su sueño es superar la fase de grupos. Para obtener su boleto a la máxima cita del fútbol, dio la sorpresa en su competencia continental al derrotar al local y anfitrión Marruecos por 2-1 en la final.
Las Banyana Banyana llegan al certamen con un andar irregular que incluye una derrota en un amistoso contra Serbia con un ajustado 3-2. En el calendario también tuvieron un empate ante Eslovenia, una victoria frente a Uzbekistán,y cerraron la preparación con una dura caída por 5-0 contra Botsuana y vencieron 2-0 a Costa Rica en este 2023.
El conflicto se desató entre la Asociación de Fútbol de Sudáfrica y el plantel luego de que las seleccionadas reclamaran que el monto para cada una por participar en la Copa del Mundo fuera incluido en sus contratos para asegurarse que sea abonado. El reclamo se trasladó al amistoso con Botsuana y por eso el resultado terminó siendo tan llamativo por la rotación de jugadoras: varias no se presentaron al Tsakane Stadium y las autoridades las catalogaron como “mercenarias y traidoras”.
La Fundación Motsepe intervino antes del partido ante Costa Rica y entregó 320.000 dólares para solucionar la situación.Según anunciaron diversos medios locales, el problema fue resuelto y vencieron 2-0 con comodidad al combinado centroamericano.
El año pasado, Sudáfrica demostró que es una fuerza a tener en cuenta en los torneos. El combinado aterriza en el Mundial con la moral por las nubes tras proclamarse campeona de la Copa Africana de Naciones femenina, la primera de su historia. La seleccionadora Desiree Ellis declaró en varias oportunidades que “las expectativas van a ser aún mayores de ahora en más”, y espera que sus jugadoras den el salto de calidad que las lleve a dominar su continente durante varios años.
La realidad es que la nación tiene muchas esperanzas depositadas en este torneo sobre todo teniendo en cuenta su estado de forma en 2022. Para cumplir las expectativas, el objetivo es conseguir al menos tres puntos en la fase de grupos y Argentina es el principal rival a vencer por nivel y presente. Tiene calidad y determinación, y si obtiene un resultado positivo en su primer encuentro contra Suecia, el cielo es el límite para lo lejos que puede llegar.
FECHA 3: SUECIA
El plato fuerte del Grupo G será en la tercera fecha cuando enfrente al número 3 del ranking FIFA: Suecia. El combinado europeo participó de todas las ediciones de la Copa del Mundo femenina (1991, 1995, 1999, 2003, 2007, 2011, 2015 y 2019) pero nunca pudo bordar una estrella en su escudo, con un subcampeonato en Estados Unidos 2003 y tres terceros puestos en China 1991, Alemania 2011 y Francia 2019.
Las Blagult están repletas de estrellas y figuras internacionales que conforman los planteles de los clubes más exigentes del mundo. Los últimos partidos de Suecia fueron con resultados confusos: victoria por 4-1 sobre China, empate a 0-0 con Alemania, caída ante tanto Dinamarca y otra igualdad con Noruega. Lo que más preocupó a los aficionados suecos es que en la preparación se utilizó a la formación titular y las conclusiones fueron más negativas que positivas.
Pero la realidad es que Suecia tiene un sólido historial en la Copa Mundial y estos partidos al final son considerados simplemente como una práctica. El equipo de Peter Gerhardsson experimentó con novedosas tácticas y aprovechó para limar cualquier tipo de error en los meses siguientes. Un detalle que Argentina debe prestar atención fue la caída ante Australia por 4-0, en la que las europeas quedaron visiblemente expuestas en los contraataques.
Con la experiencia que tienen en su espalda y los nombres propios que integran el plantel, el objetivo de las suecas es pelear hasta el final por el título. Cualquier tipo de derrota antes de los cuartos de final podría hasta ser catalogada como un fracaso.