A 4 meses de haber desaparecido, su familia no descansa y sigue pidiendo que se investigue qué ocurrió.
Diego Barría desapareció el 18 de febrero de este año cuando circulaba por las playas de zona norte de Comodoro. Su familia emitió un comunicado a 4 meses de su desaparición y búsqueda:
«El día 19 de febrero de 2023 (hace exactamente 4 meses) todo Comodoro Rivadavia, Chubut y gran parte del país estábamos buscando a los que mataron a DIEGO ALEJANDRO BARRIA, de 32 años…
Él era un loco, fierrero, motoquero y fanático de los jeeps y 4×4, mecánico, y vivía para salir a auxiliar a todo aquel que se quedaba tirado por ahí con su jeep y sus malacates …
Demostró su solidaridad cuando en las inundaciones de 2017, cargó su Jeep y sus equipos, sus sogas y su ropa de agua y botas de barro para salir a rescatar familias y personas que de pronto vieron cómo se perdían sus pertenencias y ponían en riesgo su vida para llegar a casa o proteger sus bienes y familias…
Así también se hizo conocido y querido en el ambiente de los mecánicos: ¡Dieguito “Cachidudo” –como le decían sus amigos- porque apenas alguien lo llamaba o leía en un grupo de Jeeperos que alguien se quedaba con su vehículo roto, encajado en una playa, en alguna ruta o en los hostiles caminos Patagónicos, él no dudaba en llamar a un par de amigos Jeeperos, Motoqueros o Mecánicos, para salir a auxiliar a quien sea!! Conocido o no…
Un 18 de febrero a salió de trabajar a las 18 hs., en Vientos del Sur, le pidió a su madre que le arme la mochila para ir al campo del Tío Willatoski (El tío Niti), que fue uno de sus dos tíos paternos que hizo las veces de PADRE – ya que nunca tuvo uno -, quien le enseñó todo lo que tenía que saber sobre el campo desde que tenía 5 años…
Diego sabía esquilar, arrear ovejas, hacer las señaladas, llevar víveres al campo para los peones, cortar y acopiar leña para e inverno y sacrificar animales moribundos o asistir a las ovejas en la parición… Desde chiquito el campo de Puerto Visser fue su segundo hogar…
Ese 18 de febrero llegó a la casa después del trabajo, agarró su mochila, llevó ropa para un fin de semana largo (bombachas de campo, abrigo, alpargatas y hasta sus boinas y mate) para salir al campo del tío, como siempre… Solo que esta vez estaba roto, triste porque tres días antes estuvo en ese mismo campo cavando la fosa de su Tío Niti…
La última foto que apareció en el estado de WA de Diego, fue a las 21:01 hs., en la estación de servicio de Km 8. Cuando sacó una foto de su cuatri, su mochila y puso un comentario que decía “viaje con escalas”… Porque Él sabía que ese fin de semana largo – lunes y martes de carnaval sumado al viernes -día de la memoría -todos los Ranchos de la playa desde Rocas Coloradas hasta “el Visser”, estarían colmadas de amigos, juntadas, pesca y Jeepeadas…
Diego mil veces concurrió a esos findes XXL. Pero esta vez sería distinto para él, ya que la familia lo estaba esperando para cenar en el campo, porque estaban todos tristes y de luto, por el fallecimiento unos días antes del Tío NITI, el “jefe” del campo familiar… (para Diego, Niti era el padre, el que le enseñó todo lo que tenía que saber para manejar un campo)
Desde las 22 horas hasta las 23.30 hs de ese 18, Diego pasó Rancho por Rancho en su cuatri, a saludar, a conocidos y no conocidos. En cada Rancho fue invitado a cenar y a tomar alguna cerveza. Pero todos los testimonios coinciden en que Diego no aceptaba, ya que en cada Rancho aclaró que la familia lo estaba esperando para cenar…
Así fue visto por última vez en el Rancho “JC” (uno de los últimos antes de llegar al alambrado del campo familiar).
Aún en el camino quedaban dos pequeños Ranchos antes del alambrado del campo familiar, y luego del zanjón, está “El Vidriado” o “Rancho de Bruno”, donde también habían 4 personas, un par de amigos y otros conocidos, pero nunca se supo si llegó ahí o no..
Diego fue esperado por la familia hasta pasadas las 2 de la mañana del 19 de febrero, nunca llegó, nadie durmió en la Estancia, todos lo esperaban, pero ante la falta de señal de celular, supusieron que se quedó en algún Rancho con sus amigos, pero ante su promesa de llegar a cenar, la inquietud no estuvo ausente …
El 19 a las 7 de la mañana (según algunos testimonios), apareció su cuatri destrozado en la playa, pasando el zanjón, y a unos 500 metros del camino que Diego debía tomar para ingresar a la estancia…
Era noche cerrada, pero buen clima, algo de marejada que Diego también conocía como la palma de su mano y las opciones alternativas que tenía para trasladarse en su cuatri por campo traviesa…
Luego de intensa búsqueda fueron apareciendo 2 o 3 pertenencias de Diego que fueron “notoriamente plantadas” por el estado, los lugares donde fueron encontradas, el estado de las mismas, etc…
Amigos del 4×4 no descansaron en la búsqueda, la misma empresa donó el combustible y muchos amigos dejaron destrozados sus vehículos para abarcar la mayor extensión posible de búsqueda.
Desinteresadamente salieron aviones del Aeroclub de Comodoro Rivadavia, particulares con sus drones y equipamiento, grupos de Trekking, pero todo indicaba que a Diego “se lo tragó la tierra” NO EL MAR!! Pues el mar no se llevó ninguna de las partes de su cuatriciclo ni su casco…
Es más, muchas testimoniales aseveran que el cuatri fue prácticamente “saqueado” hasta las llaves y el combustible se llevaron los transeúntes… El cuatriciclo de Diego estuvo casi 48 horas tirado en la playa SIN CUSTODIA, y acarreado por algunos bienintencionados” que aseguraban que había que protegerlo para que el mar no se lo lleve… (as lo manosearon, sacaron y arrancaron sus partes y fue arrastrado con sogas de un lugar a otro, hasta que fue “resguardado” para la “futura pericia”)
El 26 de febrero, la familia fue convocada a reconocer un “tatuaje” que casualmente encontraron unos pescadores… pero un par de meses más tarde, la pericia dijo que el ADN no reúne material suficiente para determinar si esa porción de piel es de DIEGO o NO.
Muchos compraron el accidente, los cazones y cuanta fábula más creyeron que la sociedad crea, y que éste sea un Caso más resuelto y cerrado.
Acá No hay un caso resuelto. La familia y los amigos motoqueros y mecánicos SABEN Y NO DUDAN que Diego NO TUVO UN ACIDENTE, que DIEGO JAMAS VOLCÓ NI CAYÓ AL MAR…
Diego conocía Puerto Visser y esas playas como la palma de su mano…
Tiene 3 hijos que el domingo 18 de Junio (4 meses después) no supieron donde llevarle a su papá una flor, y una Empresa que le liquidó los 18 días de trabajo después de tenerlo 2 años contratado indefinidamente y el Sr. JORGE LOMA AVILA no hizo nada por la familia y la ilegalidad de esa contratación, y se le depositaron los proporcionales de los días trabajados que dormirán en una cuenta que ni a sus hijos les va a servir si no aparece el cuerpo…
A muchos se les detuvo la vida ese 19 de febrero y PEDIMOS JUSTICIA Por esos 3 bebés que nunca va a ver crecer… «
