Intentaron desarrollar sus actividades durante el fin de semana en el predio que les había sido designado, pero debido al viento y la tierra en el sector, tuvieron que trasladarse nuevamente a la plaza Carlos Gardel.
Si bien este fin de semana los feriantes del 9 de Julio debían iniciar sus actividades en el predio de la Asociación Pro Ayuda Recuperación Integral (APARI) ubicado sobre calle Salta, en diagonal a la plaza Carlos Gardel, el viernes se instalaron pero debido al viento comenzó a esparcirse gran cantidad de tierra lo que hizo imposible que pudieran permanecer allí, retornando al espacio público en el que inicialmente estaban.
Ayer, teniendo en cuenta que las condiciones climáticas, en cuanto al viento, no habían cambiado, directamente se instalaron en la plaza nuevamente y permanecerían allí durante el resto del fin de semana.
Graciela García, una de las feriantes y vocera explicó que “estamos en la plaza nuevamente porque estuvieron muy feos los días, con viento y tierra; vinimos de manera provisoria, después vamos a volver allá (por APARI) pero queremos que pongan agua, aplanen o se haga algo. Pasaron la máquina y así no se podía estar por el clima, por eso tuvimos que volver a la plaza” dijo. Y añadió: “las cosas que trae la gente se arruinan con la tierra y es como le dijimos al señor (Ricardo) Gaitán, en realidad en la plaza nosotros dejamos todo en condiciones, no la dejamos sucia, cuidamos como si fuera nuestra casa porque es nuestro trabajo”, informó Crónica.
En este marco, apuntó: “vamos a tratar de conversar por esto a ver qué solución nos pueden dar esta semana, hablamos con el comisario Cocha también para reunirnos nuevamente para ver qué pasa”.
Por su parte Mabel Acuipil, feriante y también vocera, mencionó que “si vos te fijás, hay un muchacho que viene con el bebé porque sí o sí lo tiene que traer a la feria y ayer (por el viernes) estaba complicado, entonces por asambleas decidimos entre todos los feriantes que estábamos en el predio venir a la plaza a trabajar este fin de semana. Acá estamos tranquilos; por el tema del viento y la tierra se echan a perder las cosas; nosotros teníamos mesitas pero hay gente que viene en colectivo y tiran las cosas sobre una manta, a ellos se les volaba todo, hasta los percheros se volaban, las mesas completas”.
Agregó que “a nosotros igual nos gustaría estar un sábado o domingo en nuestra casa con la familia, disfrutar de mirar tele tranquilos pero tenemos que estar acá por necesidad, tampoco es que uno se lleva un dineral pero por lo menos hay gente que salva la semana para llevar un plato de comida a la casa todos los días. Hay gente que vende acá y se cruza a La Anónima para poder llevar comida a la casa o compra a algunas cosas que necesita acá mismo. No molestamos a nadie, acá se puede ver que estamos tranquilos” dijo entre otras cosas
