El ministro de Seguridad aseguró que los candidatos del PRO y el liberalismo poseen “cero formación” y que solo tienen “vocación por lastimar”.
El ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, advirtió este jueves que “las calles van a estar regadas de sangre y de muertos” si el sector más duro de la oposición gana las elecciones presidenciales este año.
“Lo que se puede ver es quiénes van a competir contra quiénes. Vemos un grupo de gente que tiene cero formación, con vocación por el agravio y por lastimar, y lo que propone saldría únicamente por represión. Las calles regadas de sangre y muertos van a producir si tuvieran la posibilidad de ser Gobierno”, señaló el funcionario “albertista” respecto del crecimiento en las encuestas de candidatos volcados a la derecha como Patricia Bullrich y Javier Milei.
En diálogo con C5N, Aníbal planteó que “durante toda la vida” Juntos por el Cambio “ha llegado a las gestiones como una izquierda perfumada”.
“Votaban por izquierda y gobernaban por derecha. En algún momento se rompe ese esquema y se presentan a cara descubierta, con esas ideas que son absolutamente esquizofrénicas y sin ningún pensamiento. Ningún criterio que proteja a un país de un montón de cosas importantes que tiene que proteger para seguir creciendo y aspirar a tener una movilidad social ascendente”, señaló.
Por otra parte, consultado sobre la interna oficialista y el armado electoral del Frente de Todos, el titular de la cartera de Seguridad volvió a respaldar la candidatura de Alberto Fernández, y aseguró que, pese a las presiones de La Cámpora, el nombre del postulante del FDT de definirá en las PASO: “Las PASO vinieron a reemplazar a las internas dentro de un mismo partido, donde el caudillo elegía con el dedo, o la rosca de los ventajeros seleccionaba con el dedo”.
Y sumó, en esa línea: “Yo tengo toda la vocación del mundo de ganar. El que manda es el Presidente, que es quien da el puntapié inicial. Soy un carnívoro hecho y derecho y no sé vivir de otra manera que no sea comiendo carne. Necesito que el Presidente dé el guiño, nomás”.