La Academia igualó 3 a 3 con el Halcón y complicó sus aspiraciones en la recta final de la Liga Profesional. El equipo de Gago recibirá a Atlético Tucumán la próxima fecha.
Luego del agónico triunfo ante Rosario Central por 4 a 3 en el Cilindro de Avellaneda, Racing se presentó en el Norberto Tomaghello de Florencio Varela con la misión de sumar otra victoria para seguir en la lucha por el campeonato. El conjunto de Fernando Gago impuso un ritmo vertiginoso desde el comienzo. Con la calidad de Emiliano Vecchio, el talento de Matías Rojas y la velocidad de Johan Carbonero, la Academia amenazó desde el principio a Defensa y Justicia.
El espectáculo pudo ser titulado con la tradicional Ley del ex. El virtuoso volante paraguayo fue el encargado de abrir el marcador después de una fabulosa triangulación entre el ex Rosario Central y el colombiano. Por su pasado en el Halcón, Rojas decidió no festejar su conquista. Pero la alegría duró poco para los albicelestes. Casi sin buscarlo (ni merecerlo), Kevin Gutiérrez envió un centro peligroso al arco de Gabriel Arias y se coló en el ángulo. El pedido de disculpas del Facha se basó en sus orígenes en el predio Tita Mattiussi.
El golpe le dejó la mandíbula floja a Racing. Por lo tanto, el combinado liderado por Julio Vaccari se aprovechó del estado anímico de su rival para revertir el marcador. Un contragolpe perfecto y una milimétrica habilitación hacia Gabriel Alanís conformaron los argumentos que le dieron la felicidad al Halcón. De todos modos, el choque se mantenía abierto.
Así fue como antes de la llegada del descanso el Lolo Miranda abasteció a Vecchio con una visión magnífica, y la figura rosarina volvió a emparejar las acciones ante la salida de Ezequiel Unsain. Si bien en primera instancia la jugada había sido invalidada por un supuesto offside, el VAR intervino para corregir al asistente y confirmar el 2 a 2. En una tarde cargada de emociones, todavía quedaba un tiempo por jugarse.
Los protagonistas no dieron respiro. Todo lo bueno que hacía el elenco de Pintita en el ataque era completamente opuesto al desarrollo defensivo. La falta de equilibrio de Racing le daba la oportunidad a Defensa y Justicia de quedarse con el triunfo. En la más clara del complemento Alanís se sacó de encima a Emiliano Insúa y envió un disparo cruzado que Gastón Togni no pudo capitalizar. Un palo milagroso salvó a la Academia.
Una de las máximas que exigen los aspirantes al título es el equilibrio y la solidez defensiva, algo de lo que el conjunto de Gago careció durante toda la Liga Profesional. Por lo tanto, cuando Julián López encaró con convicción y se asoció con Togni, la última línea albiceleste solo atinó a observar cómo la pelota ingresaba en el segundo palo.
Además, Gabriel Alanís liquidó el compromiso después de un contragolpe perfecto comandado por el Facha Gutiérrez. El volante central fue una de las figuras de la jornada, ya que extendió la jugada hacia Nicolás Fernández y Uvita asistió al goleador: 4 a 2. Sin embargo, una mano de Julián López en el inicio de la escena invalidó la conquista y cambió el destino de la noche. VAR, polémica y penal para Racing.
La pésima ejecución de Vecchio mantuvo el triunfo local. Fue una de esas situaciones inexplicables que tiene el fútbol, porque los mejores también fallan. El ex hombre del Canalla intentó asegurar su remate y su ejecución se fue por encima del travesaño.