El duelo entre el Millonario y el conjunto japonés, que se jugó en Seattle por la primera fecha del grupo E, fue el compromiso con menos asistencia en lo que va del certamen, sobre todo argentinos fanáticos del conjunto de Núñez
River se quedó con el triunfo por 3-1 ante Urawa Red Diamonds en su debut en el Mundial de Clubes, que lo dejó bien parado de cara a la pelea por la clasificación a octavos de final en el grupo E, pero el partido no generó la expectativa que se esperaba: hasta el momento había sido el de menos asistencia en lo que va del certamen que se está disputando en Estados Unidos.
Pero en el encuentro entre Mamelodi Sundowns y Ulsan Hyundai se registró la menor cantidad de aficionados.
Según la información que difundieron desde la FIFA, el encuentro de River tuvo presencia de apenas 11.974 espectadores, muy por debajo de los números que venían mostrando los otros nueve partidos que se disputaron hasta ahora por el certamen internacional.

La cantidad de asistentes llama la atención por tratarse de un conjunto sudamericano, continente que venía moviendo mucha masa de hinchas. Más allá de eso, en el duelo entre sudafricanos y surcoreanos hubo menos cantidad de personas: 3.412.
La poca presencia de fanáticos en el Lumen Field se explica por varias razones, en especial, la sede que le tocó al Millonario.
El problema es que River está asentado en Seattle, ciudad del Estado de Washington, lindante con Canadá, que tiene una enorme distancia con Argentina, precios altos en los aéreos para llegar, además del tiempo que demora el viaje. Circunstancias muy disímiles con Miami, la ubicación que le tocó a Boca.
